Quito, 19 oct (EFE).- El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, inició este martes su primera visita a Ecuador, país que la Administración Biden sitúa a la cabeza de los que se beneficiarán de la iniciativa B3W (Reconstruir un Mundo Mejor), pero ha eludido hablar de un acuerdo comercial cercano con el país andino.
Ecuador recibió hoy al jefe de la diplomacia estadounidense en su primer periplo oficial a Suramérica y con una agenda bilateral cargada de asuntos de máximo interés como seguridad, combate al narcotráfico, migración, medioambiente, pero uno central para el país andino que tiene a EE.UU. como principal socio comercial: el de lograr un acuerdo amplio en esa materia.
Sin embargo, al ser interpelado sobre esa cuestión, Blinken mencionó una serie de hitos que estrechan los lazos económicos de ambos países, pero rehusó referirse específicamente a la posibilidad de un tratado comercial o el estado en el que se encuentran unas conversaciones aún en fases muy iniciales.
SIN SEÑALES DE ACUERDO
"Desde agosto, tenemos los protocolos de comercio y transparencia para trabajar en conjunto y crear un ambiente de inversión más potente y atractivo para empresas estadounidenses", manifestó el alto funcionario norteamericano al enumerar varios proyectos conjuntos y el crecimiento experimentado en comercio e inversión.
En una región donde ya no es el principal actor comercial como hace dos décadas, Washington busca ampliar la cooperación con países como Ecuador a través de préstamos de la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de los Estados Unidos (DFC, por su siglas en inglés), para proyectos de empoderamiento femenino, pymes, infraestructuras, energías renovables, etc.
Blinken avanzó que habrá más iniciativas de este tipo en el futuro, que los dos países están en proceso de negociar un acuerdo de cielos abiertos, que la agenda compartida "es fuerte en comercio e inversión" y "verá un gran crecimiento". Pero de un acuerdo comercial ni pío.
Su homólogo ecuatoriano, Mauricio Montalvo, expresó, no obstante, que la cuestión fue tratada en las conversaciones y que Blinken "ha tenido la franqueza y frontalidad de exponer la posición del Gobierno de EE.UU, lo que tiene la Administración Biden por ahora".
Esta se resume en las numerosas líneas de cooperación "para trabajar con Ecuador de manera constructiva, incluyendo los aspectos comerciales".
Y fue más lejos al señalar que, "más allá de un tratado de comercio justo, lo que existen son otras propuestas como las de Reconstruir un Mundo Mejor" contenidas en el programa B3W, lanzada en junio por el presidente Joe Biden en el marco del G7, con el propósito de contrarrestar la influencia estratégica de China en el continente.
Montalvo pronosticó que a inicios del próximo año se espera que se ponga en marcha en Ecuador con "proyectos específicos" esta propuesta que competirá con la Franja y la Ruta china, y agradeció que el país andino figure entre los primeros beneficiarios.
¿CHINA O EE.UU?
El Ejecutivo de Guillermo Lasso, que entró en funciones en mayo pasado, se ha puesto como meta lograr acuerdos comerciales con las principales economías del mundo, incluida China, actor fundamental para la ejecución del exitoso plan de vacunación contra la covid-19.
El secretario de Estado aclaró que la asociación entre EE.UU. y Ecuador, "está enfocada en intereses comunes, valores compartidos y un programa positivo, no se define por ningún tercer país", antes de asegurar: "No pedimos a los países que opten entre EE.UU. y China, ni queremos contener a China, ni frenarla de ninguna forma. Lo que sí queremos es apoyar las normas más altas en todo el mundo".
NARCOTRÁFICO Y MIGRACIÓN
Su visita se produce en momentos de gran conmoción social por la inseguridad que vive el país vinculada al narcotráfico y la declaratoria en la víspera de un estado de excepción por el Gobierno.
En este contexto, Blinken habló de la necesidad de abordar el fenómeno del narcotráfico de forma integral y bajo una "responsabilidad compartida" y resaltó que la oficina internacional de asistencia antinarcóticos, la INL, viene trabajando activamente con sus contrapartes ecuatorianas y se han destinado 30 millones de dólares en asistencia bilateral desde que el programa se reinició en 2018.
Y expresó su comprensión de las "circunstancias excepcionales" que atraviesa el país, que requieren de "ciertas medidas para bregar con situaciones como las que experimenta Ecuador en este momento", si bien abogó porque el estado de excepcionalidad tenga un plazo limitado en el tiempo y esté apegado a la ley.
El secretario de Estado viaja el miércoles a Colombia, donde analizará con representantes de países de la región el fenómeno de la migración en el hemisferio y vías para combatir los flujos riesgosos de manera conjunta.
