Una semana después del inicio de las ventas de cannabis recreativo en Ohio, las normas estatales buscan prevenir el acceso de los niños a productos de cannabis. Los dispensarios han informado de una demanda continua y fuerte, pero el envasado de estos productos está sujeto a estrictas regulaciones. Estas reglas aseguran que los consumidores sepan lo que están comprando y, lo más importante, que los productos sean inalcanzables para los menores.
Ohio ha implementado un enfoque conservador en el envasado de cannabis. Según la ley estatal, los productos deben estar en empaques a prueba de niños, resistentes a la luz y con indicadores claros de manipulación. John Hartsell, cofundador de DIZPOT, explicó que los empaques deben ser seguros para los niños, pero también accesibles para adultos con dificultades físicas, como la artritis. La ley prohíbe diseños que puedan atraer la atención de los niños, como los empaques que imitan dulces comunes.
A pesar de estas medidas, Hartsell advierte que ningún envase es infalible. Es crucial que los productos de cannabis no se dejen al alcance de los niños, incluso en empaques seguros. La normativa de Ohio busca equilibrar la seguridad infantil con la funcionalidad del empaque, pero la responsabilidad última recae en los adultos para mantener los productos fuera del alcance de los menores.