Quito, 26 oct (EFE).- Una tensa calma se registró en Ecuador durante las primeras horas de este martes, en que se diversas organizaciones sociales han convocado a manifestaciones en contra de intentos de reformas por parte del Ejecutivo y en demanda del congelamiento del precio de los combustibles.
A primeras horas de hoy, ciertas vías de la provincia andina de Pichincha, cuya capital es Quito, amanecieron bloqueadas por manifestantes, que quemaron neumáticos en la calle.
La Asociación Nacional de Productores y Exportadores de Flores de Ecuador (Expoflores) publicó en su cuenta de Twitter fotografías de camiones lanzando tierra para bloquear la carretera y de vías cortadas con ramas de árboles, lanzadas por los manifestantes en el sector que conduce a zonas donde se cultivan flores.
NORMALIDAD EN QUITO
En contraste, en calles y avenidas de la capital ecuatoriana no se registraron bloqueos en las primeras horas de este martes, cuando incluso las unidades de transporte público trabajaron con normalidad pese a que el lunes advirtieron que no circularían durante las primeras horas del día.
En calles de Quito, Efe constató menos tráfico de lo habitual a primeras horas del día y el centro histórico con libre circulación. Incluso el sector de la Plaza de la Independencia, donde se encuentra la sede del Ejecutivo, se encontraba abierto, pero con contingentes policiales y ciertas restricciones.
Fuentes militares en el lugar indicaron que el cierre, por seguridad, de la zona alrededor del palacio de Carondelet (sede del Ejecutivo), iniciará en torno a las 10:00 hora local (15:00 GMT).
El dispositivo de seguridad en el sector está dividido en varios perímetros: los del exterior los controla la Policía y los del interior, el Ejército.
Juan Carlos Soria, Jefe del Distrito Manuela Sáenz, en el centro de Quito, dijo a Efe que desde la madrugada ejecutan acciones para evitar que se interrumpa la circulación peatonal, de vehículos o las actividades comerciales y financieras de la ciudad.
"Como distrito Manuelita Sáenz únicamente estamos reforzando con personal policial para evitar algún tipo de eventualidad de acuerdo a las alertas que se vayan presentando, de acuerdo a las apreciaciones o las informaciones que tangamos durante el día", comentó tras recordar que el país está bajo un estado de excepción decretado la semana pasada por el presidente Guillermo Lasso ante los altos índices de inseguridad en el país.
En el corredor centro-sur de la provincia de Pichincha, Efe constató que no se registraron manifestaciones en las primeras horas de este martes.
El capitán Álvaro Cali, de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, dijo a Efe en el peaje de Machachi, que realizan operativos de seguridad en el marco del estado de excepción decretado por Lasso.
Presente en la vía desde las 05.00 hora local (10.00 GMT), Cali comentó que ciudadanos que circulaban por la zona reportaron normalidad en la jornada a primeras horas del día.
Por otra parte, hubo bloqueos en la provincia de Imbabura, en la zona norte del país, y cortes de vías en la amazónica de Pastaza.
Decenas de militares y policías están desplegados en las vías del país para impedir bloqueos y habilitan carreteras cuando encuentran alguna novedad.
CONGELAR ALZA DE PRECIOS, NO SUSPENDER
Se prevé que en la tarde, al finalizar la jornada laboral, se sumen a las manifestaciones decenas de trabajadores que reclaman también por la congelación del precio de los combustibles y rechazan las proyectadas reformas laborales del Gobierno al considerar que precarizan al sector.
La convocatoria a las manifestaciones, de alcance nacional, salió desde el Frente Unitario de Trabajadores (FUT), la principal central obrera del país; la poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie); el Frente Popular; la Unión Nacional de Educadores (UNE), y la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE), entre otras.
El objetivo es plantar cara al Gobierno en varias ciudades del país pese al anuncio de suspender los incrementos de los combustibles, provocados por un sistema de fijación de precios con base en el mercado internacional que implementó la Administración de Lenín Moreno (2017-2021).
Lasso detuvo la oscilación en 2,55 dólares el galón de la extra y 1,90 el del diesel, insuficiente para los movimientos sociales.
"Que se congele, no solo que se suspenda, porque sino también con conceptos se puede estar, en ese sentido, engañando al pueblo ecuatoriano", advirtió Leonidas Iza, presidente de la Conaie en una rueda de prensa este lunes.
Los combustibles son uno de los asuntos más espinosos en el país andino, y un intento de Moreno de eliminar los subsidios condujo en octubre de 2019 a una ola de violentos disturbios, que dejaron un balance de al menos seis muertos y 1.500 heridos.