Un grupo de defensores de la seguridad comunitaria está recorriendo las calles de Avondale en Cincinnati para abordar las causas fundamentales de la violencia. La coalición, que se reúne dos veces por semana, busca conectarse con los residentes, compartir recursos y mantener conversaciones significativas. “El objetivo número uno es realmente mostrar presencia”, dijo Ozie Davis, un activista local.
Llevando camisetas que representan diferentes organizaciones, los activistas caminan por Reading Road con un objetivo común: reducir la violencia en la ciudad. Michelle Robinson, de la Urban League, destacó la unidad del grupo. “Un grupo, una entidad”, afirmó. Los activistas ofrecen recursos laborales y servicios de salud mental, aprovechando un enfoque exitoso utilizado desde 2015 con el apoyo de la policía de Cincinnati.
El esfuerzo, surgido tras un foro sobre violencia adolescente, muestra el compromiso de la comunidad con la seguridad. “Está afectando a todos, desde los bebés hasta los ancianos”, dijo Robinson. Mitch Morris, de Save Our Youth Kings & Queens, instó a la acción: “Tienes que levantarte, salir y tratar de hacer algo con solo un apretón de manos, un abrazo o una sonrisa; involucrarte de alguna manera”.
