Matías Romero (México), 16 nov (EFE).- La caravana migrante que trata de recorrer México desde el sur hasta la frontera norte ingresó este martes a Veracruz (este), el tercer estado que pisan desde su salida el pasado 23 de octubre desde la ciudad fronteriza de Tapachula, en el estado de Chiapas.
"Hasta la vista Oaxaca, ¡adiós!", exclamó un migrante alzando las manos en dirección hacia el arco que divide los dos estados y que dice "Bienvenidos a Veracruz".
La última parada de los migrantes -en su mayoría centroamericanos- en Oaxaca fue en la localidad de Nuevo Ubero, perteneciente al municipio de Matías Romero.
La caravana ha ido reduciendo su número de integrantes, que llegó a alcanzar aproximadamente las 6.000 personas. El motivo principal es que muchos de ellos aceptaron los ofrecimientos de las autoridades de recibir tarjetas de visitantes por razones humanitarias y de residente permanente.
Además, empiezan a sufrir los estragos de las arduas caminatas, por lo cual las autoridades estatales de Oaxaca han habilitado un consultorio móvil para atenderlos.
En esta escala en Matías Romero, los organizadores de la caravana les informaron que al ingresar a Veracruz los estaba esperando un retén del Instituto Nacional de Migración (INM). "Descansemos, descansemos, que tenemos un retén fuerte allá adelante", les compartieron.
OFRECIMIENTO INCIERTO
Tras el descanso, los aproximadamente 1.000 migrantes -según estima Protección Civil- avanzaron y llegaron a un retén del INM al avanzar el primer kilómetro en Veracruz, donde al menos 50 agentes custodiados por la Guardia Nacional los esperaban para "invitarlos" a regularizar su estancia en México.
"De manera ordenada y respetuosa los invita a realizar su regularización de estancia en este país para que de esta manera (...) puedan recibir una tarjeta que les permita permanecer libremente en territorio nacional", dijo una agente de Migración a través de un megáfono.
El mensaje irritó a los migrantes, quienes detuvieron su caminata para gritar consignas de rechazo a este ofrecimiento. "¡Fuera, fuera! ¡qué se vayan!", exclamaron.
Uno de los activistas que acompaña la caravana, Irineo Mujica de Pueblo Sin Fronteras, reclamó a los agentes del INM que estas tarjetas deberían ofrecerlas en Tapachula.
"No creen en ello, nos han golpeado, nos han desdeñado. Entonces, que les ofrezcan esto no lo creen. Ellos mismos han desvirtuado estas tarjetas humanitarias, ¿cómo les puedes creer a personas que nos han hecho mucho daño?", expresó el activista.
Sin embargo, al menos una decena de migrantes se entregaron en este retén, como Marlo, de Honduras.
"Espero en Dios que realmente me den esa tarjeta sin necesidad de nada", dijo, y la respuesta del delegado del INM en Veracruz Roberto González López fue "para mañana tienes la tarjeta".
En entrevista, el delegado descartó que el operativo del INM sobre dicha carretera haya sido montado para detener el avance de la caravana.
La protesta por parte de los migrantes continuó durante unos 20 minutos y finalmente siguieron su camino sin mayores incidencias.
"No se les está deteniendo el paso, simplemente les dimos agua, les dimos atención médica a los que venía mal, (...) en todo el camino se les ha dejado pasar únicamente a pie es el único requisito", explicó el funcionario.
De hecho, aseguró, se atendió a un niño que se encontraba mal y tenía tos que resultó tener una bronquitis.
La caravana migrante tiene planeado llegar este martes a inmediaciones del municipio veracruzano de Jesús Carranza y retomar mañana su camino en el tercer estado que cruzan en México.
El INM puntualizó que hasta este lunes 1.479 migrantes dejaron la caravana, en su mayoría mujeres y niños, para regularizar su estancia en el país. Y recordó su invitación para regularizar el estatus migratorio de las personas migrantes y darles refugio en el país.
La región vive un flujo migratorio récord hacia Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) "encontró" más de 1,5 millones de indocumentados en la frontera con México en el año fiscal 2021, que terminó el 30 de septiembre.
Este grupo se puso en marcha después de que en los primeros días de septiembre las autoridades mexicanas frustraran el avance de cuatro caravanas migrantes que partieron precisamente desde Tapachula, municipio de Chiapas fronterizo con Guatemala.
México ha detectado más de 190.000 inmigrantes indocumentados de enero a septiembre, cerca del triple que en 2020, además de haber deportado a casi 74.300, de acuerdo con la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación.