Miami, 18 mar (EFE).- El cohete SLS y la cápsula Orion, que llevarán a los astronautas de la NASA a la Luna, llegaron este viernes a la plataforma de lanzamiento 39B del Centro Espacial Kennedy (Florida), donde serán sometidos a una serie de pruebas antes del inicio de la misión Artemis I en los próximos meses.
Según informó la agencia espacial estadounidense, la operación de traslado de ambas naves, que juntas miden 322 pies (101,2 metros) y pesan 5,75 millones de libras (más de 2,6 toneladas), desde el centro de ensamblaje a la plataforma, distantes 4,2 millas (6,7 km), concluyó al cabo de 10 horas y 28 minutos.
Ahora se iniciará lo que se conoce como un "ensayo general húmedo" para verificar los sistemas, cargar los tanques de combustible de los cuatro motores del cohete y practicar los procedimientos de cuenta regresiva para el primer lanzamiento, que se llevará a cabo este año y que todavía no tiene fecha.
Desde 1972, cuando se llevó a cabo la misión Apolo 17, ningún astronauta de la NASA ha puesto un pie en la Luna.
La primera misión del programa Artemis, que contempla el regreso de astronautas estadounidenses a la superficie lunar probablemente en 2025, con miras a una futura colonización del satélite terrestre, será no tripulada.
Está previsto que la nave Orion llegue a una órbita de 40.000 millas (mas de 64.300 km) más allá de la Luna, lo que significa que estará a 280.000 millas (más de 450.000 km) de la Tierra.
El traslado del cohete SLS, fabricado por Boeing, y la cápsula, obra de Lokheed Martin, se hizo por una vía de cantos rodados traídos de Alabama y a bordo de un enorme y lento vehículo "oruga", el CT-2, construido hace más de 50 años para el programa Apolo.
En un momento del recorrido, la marcha, a una velocidad de menos de una milla por hora (1,6 km/h), se detuvo para ajustar el "brazo" de Orion que se utilizará para la entrada y salida de los astronautas.
"Desde este lugar sagrado e histórico, la humanidad pronto se embarcará en una nueva era de exploración", dijo el administrador de la NASA, Bill Nelson, durante la operación de desplazamiento de las naves de la Artemis I.
UN HITO CLAVE
"Salir del edificio de ensamblaje de vehículos es un momento icónico para este cohete y nave espacial, y este es un hito clave para la NASA", dijo Tom Whitmeyer, administrador asociado adjunto de Desarrollo de Sistemas de Exploración Común en la sede de la NASA en Washington.
"Ahora en la plataforma por primera vez, usaremos los sistemas integrados para practicar la cuenta regresiva del lanzamiento y cargar el cohete con los propulsores que necesita para enviar a Orion en un viaje lunar en preparación para el lanzamiento".
Después del ensayo, que puede durar unos dos días, la NASA revisará los datos antes de establecer una fecha de lanzamiento objetivo específica para el próximo lanzamiento de Artemis I.
El cohete y la nave espacial integrados regresarán al edificio de ensamblaje de vehículos varios días después de la prueba para retirar los sensores utilizados durante el ensayo, cargar las baterías del sistema, guardar la carga tardía y realizar las comprobaciones finales.
Orion y SLS luego llegarán a la plataforma de lanzamiento por última vez aproximadamente una semana antes del lanzamiento.
Con Artemis, la NASA establecerá una exploración a largo plazo en la Luna en preparación para las misiones humanas a Marte.
SLS y la nave espacial Orion de la NASA, junto con el sistema de aterrizaje humano y el Gateway en órbita alrededor de la Luna, son la base de la NASA para la exploración del espacio profundo.