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¿Cómo funciona un centro de cuidado terminal?

por Marco Trujillo (marco.trujillo@lamegamedia.com)


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CINCINNATI, Ohio — A los hispanos nos cuesta mucho trabajo hablar de la muerte.

Prepararnos para lo inevitable nos puede bloquear hasta el punto de que a veces no podemos pensar con claridad. 

Cuando algún ser querido está desahuciado sentimos como que el mundo se nos empieza a acabar poco a poco al igual que a nuestro ser amado. 

Afortunadamente existen organizaciones con guerreros que tienen pelotones cargados de ángeles, quienes ayudan a nuestros seres queridos a pasar sus últimos momentos en la mayor comodidad posible y con dignidad. Ellos también están presentes en su último suspiro.

En entrevista para La Mega Nota, el enfermero Adam Theele, de Crossroads Hospice explicó que un centro de cuidado terminal es un modelo que proporciona apoyo a las personas y sus familias en los momentos más difíciles. 

No es sólo para el final de sus días, sino más para el comienzo de la decisión de mantenerse cómodos hasta el final. 

Recomiendan que el paciente esté al cuidado desde el comienzo de su declive porque de esta manera se entabla una relación, y pueden proporcionar un apoyo creciente a medida que se va deteriorando.

Ofrecen visitas regulares de enfermería y tienen personal calificado para las diferentes necesidades como trabajadores sociales, asesoramientos de duelo y servicios religiosos, entre otros.

La Mega Nota: Usted habla algo de español y se puede comunicar pero ¿qué pasa con la barrera del idioma?

Adam Theele: Tenemos los recursos para comunicarnos como aplicaciones e intérpretes. 

La Mega Nota: ¿La comunidad hispana utiliza estos servicios?

Adam Theele: Sí los utiliza pero no con la frecuencia que nosotros quisiéramos para poder ayudarlos más. 

La Mega Nota: ¿Cómo ha sido el trabajo en este centro durante la epidemia de COVID-19?

Adam Theele: Al principio estábamos muy restringidos.

En las instalaciones sólo se permitía el exceso de enfermeros y auxiliares de enfermería aunque ellos estaban aún más restringidos. 

En algunos hogares de ancianos el programa de hospicio no estaba permitido. 

Poco a poco, hemos recuperado el acceso a estos lugares, siguiendo las directrices [de prevención] del COVID-19 como usar mascarillas al entrar en las instalaciones o en los hogares de los pacientes, equipo de protección personal, al igual que cualquier otra persona de enfermería/médica debe usar, y pruebas de COVID-19 quincenalmente. 

Por ser un trabajador sanitario y para garantizar la protección de las personas ya estoy vacunado.

La Mega Nota: ¿Cómo ustedes manejan sus emociones en este trabajo tan difícil?

Adam Theele: Esa es una pregunta difícil, personalmente, miro el servicio de hospicio y el final de la vida de manera diferente que la mayoría. 

Sé que todo el mundo tomará ese camino en algún momento, estemos ahí o no. 

Esto me da la paz que necesito para entender que estamos proporcionando un servicio de apoyo y brindar comodidad no solo para el paciente, sino también para la familia porque nos importan. Le permito a mi corazón que comprenda su dolor…yo estoy ahí para ellos. 

También nosotros tenemos accesos a apoyo y cuando hay vacaciones nos recargamos de energía.

Existen diferentes tipos de estos centros; algunos cuentan con pabellones y otros se enfocan en visitas a los hogares de los pacientes.



 
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