El Papa Francisco ha vuelto a abordar la cuestión de la presencia de homosexuales en la Iglesia, pidiendo su acogida con prudencia en los seminarios. En un encuentro con sacerdotes en la Universidad Salesiana de Roma, el Papa instó a la Iglesia a acoger a los homosexuales pero subrayó la necesidad de seguir las indicaciones prudenciales del Dicasterio para el Clero sobre su ingreso en seminarios. Esta intervención llega dos semanas después de que se disculpara por comentarios polémicos sobre "mucho mariconeo" en seminarios.
Durante la reunión a puertas cerradas, Francisco se dirigió a unos 200 sacerdotes para hablar sobre la situación actual en Europa y el mundo, incluyendo las guerras en Tierra Santa y Ucrania. Además de tratar el tema de los homosexuales en los seminarios, el Papa habló sobre las ingentes inversiones en armas, anticonceptivos y la cirugía estética. Hizo un llamamiento a un mayor esfuerzo por el bien común, la paz y el compromiso social, destacando la política como "la más alta forma de caridad".
El Papa también exhortó a los sacerdotes a acompañar con cercanía y ternura a las personas que sufren y a los ancianos. Animó a las congregaciones religiosas a utilizar sus edificios para ayudar en la emergencia residencial de Roma. Además, alertó sobre el aumento del uso de drogas y la tragedia de la soledad, pidiendo a la Iglesia que trabaje en el magisterio social para abordar estos problemas.
