Jerusalén, 30 ene (EFE).- El presidente de Israel, Isaac Herzog, partió hoy hacia Emiratos Árabes Unidos (EAU) para una visita oficial de dos días, la primera que realiza en la historia un jefe de Estado israelí a este país árabe.
"Me embarco en un viaje histórico junto con mi esposa, Michal. Estaremos visitando EAU tras el acuerdo de paz" entre Israel y este estado del Golfo que establecieron relaciones en 2020 en el marco de los Acuerdos de Abraham.
Invitado por el príncipe heredero y gobernante de facto, Mohammad bin Zayed, con quien se reunirá, Herzog alabó su liderazgo antes de la partida.
"Le deseo lo mejor y estoy agradecido por su coraje y liderazgo audaz, al forjar un acuerdo de paz con Israel y al enviar un mensaje a toda la región de que la paz es la única alternativa para los pueblos de la zona", dijo antes de subir al avión.
Herzog también mantendrá reuniones con el ministro de Exteriores emiratí, Abdulá bin Zayed Nahyan; y el vicepresidente, el primer ministro y el titular de defensa, Mohamed bin Rashid Al Maktoum; además de con representantes de las comunidades judías.
“Los EAU se enorgullecen de tener la comunidad judía más grande de los países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) y este viaje es representativo de los estrechos vínculos entre nuestras dos naciones", celebró el rabino jefe del Consejo judío de los Emiratos, Yehuda Sarna.
Mañana lunes, está previsto que Herzog inaugure el “Día Nacional de Israel” en la Expo 2020 que acoge estos días Dubái, donde el Estado judío muestra en su pabellón los avances tecnológicos y lugares de interés histórico.
El mes pasado, Naftali Benet también hizo historia al ser el primer jefe de Gobierno de Israel de visita oficial en el país del Golfo, donde remarcó el deseo de "profundizar y fortalecer la cooperación, la paz entre los dos países y las relaciones económicas".
"Esperamos con interés esta visita histórica, que mejorará las relaciones bilaterales entre los dos países, ya que nuestro objetivo es firmar importantes acuerdos económicos y comerciales entre las dos naciones en un futuro próximo", indicó el embajador emiratí en Israel, Mohamed al Khaja.
Aunque las funciones del presidente israelí son protocolarias, la visita se produce en un delicado momento político y de preocupación para Israel.
Por una parte las negociaciones en Viena entre las potencias occidentales e Irán para regresar al acuerdo nuclear de 2015, del que el Estado judío desconfía, y en el que Israel y Emiratos intentan presionar desde su enemistad con Teherán.
Pero el momento también coincide con un acercamiento entre EAU y el país persa con encuentros de alto nivel entre dirigentes de ambos países; y tras los recientes ataques de los rebeldes hutíes de Yemen contra objetivos en Abu Dabi, uno de ellos, el del 17 de enero, que dejó tres muertos.
Benet acusó a Irán de estar directamente detrás del ataque y mostró inmediatamente su apoyo a Emiratos Árabes Unidos.
“Los Emiratos están en camino de jugar el juego de Catar”, publicaba el periódico israelí, Israel Hayom, el pasado miércoles citando a un oficial israelí en referencia a las buenas relaciones de Catar con Occidente, Irán y los Hermanos Musulmanes al mismo tiempo.
Israel ha formalizado hasta ahora relaciones diplomáticas con EAU, Baréin y Marruecos -y un principio de declaración con Sudán-, en el marco de los llamados Acuerdos de Abraham que auspició la anterior Administración de EE.UU. de Donald Trump y ha respaldado el actual gobierno de Joe Biden.