El presidente uzbeko busca la reelección sin la participación de candidatos opositores
Moscú, 24 oct (EFE).- El presidente de Uzbekistán, Shavkat Mirziyóyev, acudió hoy a votar en un colegio electoral de Taskent, capital de la república centroasiática, que celebra este domingo comicios presidenciales sin la participación de candidatos opositores.
Mirziyóyev, que se presenta por primera vez a la reelección tras cinco años en el cargo, llegó al colegio acompañado por varios miembros de su familia y se abstuvo de hacer declaraciones.
La Comisión Electoral Central (CEC) declaró válidos los comicios después de que a las 12.00 hora local (07.00 GMT) hubiera votado más del 33 % de los 21,2 millones de uzbekos llamados a las urnas.
Las autoridades informaron de que los comicios transcurren sin incidentes, mientras los observadores occidentales declararon que las elecciones transcurren de manera transparente.
Mirziyóyev, que asumió el cargo hace cinco años tras la muerte del fundador de la patria, Islam Karímov, ejerció de primer ministro entre 2003 y 2016.
También han votado los otros cuatro candidatos en liza: Bajrom Abdujalímov del partido socialdemócrata "Adolat" (Justicia); Alisher Kadírov, del Partido Democrático Milly Tiklanish; Narzullo Oblumoradov, del Partido Ecológico, y Maksuda Varísova, del Partido Popular Democrático, la primera mujer en postular a la Presidencia en la historia del país.
Según la legislación nacional, sólo pueden presentar sus candidaturas a la Presidencia aquellos políticos cuyos partidos hayan sido registrados por las autoridades, lo que impidió la participación de candidatos opositores.
Pese a las promesas de reforma política que el presidente hizo tras llegar al poder, ninguna de las tres formaciones opositoras ha sido legalizada: el Partido Democrático Erk, Verdad y Desarrollo, y el Interés del Pueblo.
En vísperas de los comicios, la organización Human Rights Watch emitió un informe en el que criticó "la involución" en materia de reforma política y defensa de los derechos humanos, y denunció la persecución de la disidencia en internet.
Las elecciones son supervisadas por los observadores de la Oficina de la OSCE sobre Instituciones Democráticas y Derechos Humanos (ODIHR), a cuyo jefe de misión Mirziyóyev recibió en vísperas de los comicios.
Se espera que el presidente reciba el apoyo de la mayoría de emigrantes que trabajan en el exterior, en su mayoría en Rusia, ya que durante la campaña se opuso a fiscalizar las remesas que envían a sus familias.