“Sale el sol por la mañana, sale el sol a despertar.
Siempre sale por el este, yo lo voy a saludar.
¿Cómo estás astro del cielo? ¿Como estás amigo sol?
Alúmbranos noche y día, dándonos luz y calor”.
En mi memoria tarareo esta canción que en mi infancia marcaba el comienzo de la jornada diaria durante el año escolar. Desde los grados elementales hasta la escuela superior, el primer día de clases crea un sinnúmero de emociones con el conocer de nuevos amigos y maestros, enfrentar diferentes niveles académicos, además del reto de lograr –con el pasar de los meses– una mayor madurez y conocimiento.
Es importante formar una base académica mirando hacia el futuro prometedor que puede alcanzar cada estudiante si es perseverante hasta el último día del calendario escolar.
Los niños y jóvenes se esfuerzan por cumplir cada tarea, pero van de la mano de profesionales capacitados que los guían en su travesía educativa. No obstante, el apoyo fundamental lo reciben en su hogar. Corresponde a los padres equiparlos con todo lo necesario para el éxito académico.
A pesar de que la inflación económica ha afectado el bolsillo de los consumidores, es indispensable hacer las compras requeridas, de acuerdo con la lista de cada plantel. De esta manera, los padres/tutores estimulan el estudio, dando prioridad a las necesidades de los alumnos.
Aunque no todos los niños y jóvenes tendrán las mismas oportunidades, ellos se emocionan con el regreso a las aulas, un proceso que empieza con la organización de las listas de útiles para comprar, y la revisión de todos los implementos que se mantienen del año pasado para reusar.
Ir a la tienda para adquirir todo lo necesario no solo representa un día de compras, sino la visualización de los retos que enfrentará cada educando en el entorno escolar.
Más que comprarles una mochila, libretas o lapiceros, el regreso a la escuela se trata de ayudarlos a construir su futuro. Cuando usted diseña un edificio lo más importante es la zapata, o sea, los fundamentos. De la misma manera, ocurre con la educación, pues la formación en los grados de primaria y secundaria es esencial en esa base de formación para el futuro.
Así que este año 2023, cuando estemos equipándolos antes de regresar a clases, hagamos el proceso con entusiasmo y amor. Escuchando lo que ellos desean para darles lo mejor, siempre que esté al alcance de nuestros presupuestos.
También es recomendable permanecer atentos para aprovechar todas las actividades de regreso a clases que organizan empresas, grupos y entidades locales, ya que algunas –además de ofrecer un espacio de entretenimiento para despedir las vacaciones de verano– planifican la entrega de mochilas, cuadernos, portafolios y otros materiales básicos de las listas escolares.
A continuación, una guía de organizaciones comunitarias a las que usted puede llamar para saber si tendrán actividades familiares o iniciativas de donaciones para el regreso a clases:
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FOTOS: (FPK/Darren Zigic) | (La Mega Nota/David Rodríguez)