Extraditados de EE. UU. a Japón 2 supuestos cómplices en la fuga del expresidente de Nissan
Tokio, 2 mar (EFE).- Dos ciudadanos estadounidenses fueron extraditados este martes a Japón y pasarán a disposición judicial por su supuesta vinculación con la fuga del expresidente de Nissan Carlos Ghosn mientras se encontraba en libertad bajo fianza.
Michael Taylor, de 60 años y exmiembro de las Fuerzas Especiales estadounidenses, y su hijo Peter, de 28, llegaron hoy al aeropuerto tokiota de Narita en un vuelo procedente de Boston (Estados Unidos) y en el que viajaron custodiados por un equipo de la fiscalía del distrito de Tokio, según recogieron los medios locales.
Los dos ciudadanos estadounidenses fueron arrestados por las autoridades niponas a su llegada al país asiático, informó la cadena estatal japonesa NHK.
Ambos sospechosos de colaborar en la fuga de Ghosn fueron detenidos el pasado mayo en Massachusetts (EE. UU.) por petición de las autoridades niponas, y presentaron varios recursos judiciales contra su extradición a Japón que no prosperaron.
Según las autoridades niponas, facilitaron la huida de Ghosn desde su domicilio de Tokio, el 29 de diciembre de 2020, y su llegada a Beirut, en un avión privado, después de una escala en Turquía.
La fiscalía asegura que ambos, junto con una tercera persona, George Zayek, de origen libanés, "contribuyeron a la fuga" del exdirectivo de Nissan conociendo que no podía salir del país asiático, lo que los hace presuntamente responsables de violar las leyes migratorias y "esconder a un procesado".
Ghosn, que también fue presidente de Renault y de la firma nipona Mitsubishi, que junto con Nissan forman una alianza, fue detenido en Tokio el 19 de noviembre de 2018 y acusado de irregularidades financieras durante su gestión al frente de Nissan.
Se fugó de Japón desde el aeropuerto internacional de Kansai, en la prefectura de Osaka, meses antes de que comenzara su juicio y desde Beirut declaró a los periodistas que era inocente de los cargos y atribuyó su arresto en Tokio a luchas internas en Nissan.
Con triple nacionalidad (francesa, brasileña y libanesa), Ghosn no pasó por ningún control migratorio en Japón, ya que, según fuentes próximas al expresidente de Nissan, llegó a esconderse dentro de un baúl para llegar hasta el avión que despegó desde Osaka.
Al Líbano entró con un pasaporte francés y un documento de identidad libanés, según informaron en su momento las autoridades del Líbano.
Ghosn fue citado a declarar en el Líbano a raíz de la emisión de una circular roja de Interpol sobre el fugitivo por petición de Japón, que también ha solicitado la extradición del exejecutivo, aunque esto parece poco probable debido a la inexistencia de un acuerdo bilateral entre Tokio y Beirut.