Madrid, 18 dic (EFE).- Familiares y amigos de Santiago Sánchez, el español de 41 años detenido en Irán tras visitar la tumba de Mahsa Amini, se concentraron este domingo frente a la embajada iraní en Madrid para pedir su liberación.
El hombre se encuentra bien, tanto de salud como de ánimo, explicó a EFE su madre, Celia Cogedor, que pudo hablar con él durante diez minutos hace unos días.
Santiago Sánchez fue detenido en la ciudad kurda de Saqqez (Irán) en octubre durante un viaje a pie desde España hasta Catar, donde se disputa el Mundial de fútbol.
El español visitó y fotografió la tumba de Mahsa Amini, la mujer que murió tras ser detenida por la policía de la moral de Irán por no llevar puesto correctamente el pañuelo, un hecho que originó fuertes protestas en el propio país y gran parte del mundo contra las autoridades locales.
La madre confirmó hoy que los servicios diplomáticos españoles en Irán le hicieron llegar “vitaminas, ropa y comida” a la prisión de Saqqez, donde permanece.
Desveló que el jueves pasado fue recibida “sin cita” por el embajador de Irán, Hassan Ghasghavi, y mantuvieron un “intercambio de pareceres” tras el que quedó “realmente encantada”.
“Hablamos durante una hora de mi hijo, de sus viajes y del país”, comentó. “Todos sabemos que (Santiago) es inocente y el país (Irán) está como está, convulso”.
Agradeció el trabajo de la embajada de Irán en España, la embajada de España en Irán y del Ministerio español de Asuntos Exteriores aunque, por el momento, desconoce los plazos de una eventual puesta en libertad.
La mujer leyó hoy un manifiesto dirigido al embajador iraní para que transmita a las autoridades de su país que la actitud de su hijo "no ha sido la de querer ofenderles en ningún momento".
