Los votantes de Kentucky aprobaron la Enmienda Constitucional 1, que explícitamente prohíbe a las personas que no sean ciudadanos estadounidenses votar en las elecciones del estado, consolidando las restricciones ya existentes bajo la ley federal.
Aunque las leyes federales ya criminalizan el voto de no ciudadanos en las elecciones presidenciales, y Kentucky ya requiere que los votantes registrados sean ciudadanos con al menos 28 días de residencia en el estado, la Enmienda 1 fue propuesta para añadir esta cláusula de manera explícita en la Constitución del estado. El texto que se añade establece: "Ninguna persona que no sea ciudadana de los Estados Unidos podrá votar en este estado".
El patrocinador de la enmienda, el representante estatal Michael Meredith, explicó que la medida busca cerrar posibles lagunas en las elecciones locales, como las de juntas escolares, en las que se habían registrado casos de votantes no ciudadanos. La enmienda fue respaldada principalmente por el Partido Republicano, aunque algunos críticos señalaron que el lenguaje de la enmienda podría parecer redundante dada la existencia de los requisitos federales y estatales.