Kiev, 1 nov (EFE).- Nuevas restricciones, dirigidas a los no vacunados, empezaron hoy a regir en la capital de Ucrania, que entró en la llamada "zona roja" debido al aumento de casos de covid-19, en un intento de las autoridades de aumentar las tasas de vacunación.
A partir hoy la entrada al transporte público, restaurantes, gimnasios, centros comerciales y otros espacios públicos cerrados solo está permitida en la capital ucraniana para personas con certificado de vacunación o un PCR negativo reciente.
Patrullas de la policía comprobaban los certificados de vacunación de los pasajeros a la entrada de algunas estaciones de metro de Kiev, y los vagones circulaban medio vacíos a la hora punta.
Al mismo tiempo hubo atascos en el tráfico a medida que los no vacunados recurrieron a sus coches para trasladarse por la ciudad.
Todas las escuelas de Kiev, incluidas las de primaria, pasaron a la educación a distancia después de las vacaciones de otoño de la semana pasada.
"Tememos que una explosión de infecciones pueda paralizar el sistema médico, cuando el número de pacientes enfermos supere el de camas de hospital", dijo el domingo el alcalde, Vitaliy Klitschko.
"Podemos crear camas adicionales, pero la pregunta principal es: ¿quién va a brindar asistencia médica? No hay suficientes médicos. Ya están trabajando al límite de sus posibilidades", recalcó.
RÉCORD DE CASOS
La semana pasada, Ucrania registró el número diario más alto de casos nuevos y muertes por covid-19 desde el inicio de la pandemia.
Un total de 734 personas murieron a causa del coronavirus el 26 de octubre, mientras que tres días después se registró el número récord de 26.870 nuevas infecciones.
Desde el inicio de la pandemia más de 68.000 ucranianos murieron a causa de la covid-19.
Además de Kiev, donde hoy se detectaron 495 nuevos casos y 39 muertes, 15 de las 24 regiones de Ucrania se encuentran en la llamada "zona roja", que se introduce cuando más del 65 % de las camas hospitalarias con oxígeno están ocupadas.
Según las autoridades, hay escasez de oxígeno en varias regiones, incluidas Odesa, Chernihiv y Kherson.
El Gobierno culpa del creciente número de casos nuevos, hospitalizaciones y muertes a la agresividad de la variante delta y a las bajas tasas de vacunación, y alientan a los ciudadanos a vacunarse.
"Todos los días en Ucrania vemos un número récord de infectados y muertes. Solo hay una solución: la vacunación. Necesitamos aumentar el porcentaje de vacunados para salir de esto", dijo el presidente, Volodímir Zelenski.
Según el Ministerio de Salud, 7,4 millones de ciudadanos han recibido la pauta completa, menos del 18 % de la población y el número más bajo de Europa, según Our World in Data.
El 94 % de los pacientes hospitalizados no están vacunados.
ALTA DEMANDA DE VACUNAS Y CERTIFICADOS FALSOS
En medio del aumento de casos y las nuevas restricciones, grandes colas se formaban en los últimos días en los centros de vacunación en Kiev y en toda Ucrania.
En un centro de vacunación en la ciudad occidental de Ivano-Frankivsk, la gente impidió que el personal médico abandonara su lugar de trabajo al final de su turno el pasado viernes exigiendo que todos en la cola recibieran el preparado anticovid.
El Ministerio de Salud dijo que la semana pasada se realizaron un récord de 1,7 millones vacunaciones, más en todo el mes de junio.
Sin embargo, la renuencia a vacunarse sigue muy extendida en Ucrania. El Consejo de Seguridad y Defensa de Ucrania ha culpado a Rusia de difundir desinformación contra las vacunas a través de los canales de Telegram dirigidos al público ucraniano.
También en Telegram el mercado negro de certificados de vacunación falsos está en auge, ya que hay anuncios para vender este tipo de documentos por solo 1.500 hryvnias (50 euros).
La policía anunció una ofensiva contra los vendedores y compradores de certificados de vacunación falsos. Más de 800 casos están bajo investigación, según el Ministerio del Interior.
Una de las investigaciones más destacadas está relacionada con la exdiputada Nadia Savchenko, que fue detenida en el aeropuerto de Kiev el pasado 22 de octubre cuando intentaba viajar con un certificado de vacunación falso.
Olga Tokariuk