Puerto Príncipe, 2 nov (EFE).- La segunda jornada del "guédé", la fiesta vudú de Haití para celebrar el Día de los Difuntos, quedó reducida a su mínima expresión este martes en los cementerios de la capital a causa de la crisis de violencia que vive el país.
El grupo radical de policías llamado Fantom 509, causante de disturbios en los últimos dos años, anunció la organización de una manifestación en Puerto Príncipe para este martes, aunque por el momento no se han producido altercados.
En consecuencia, en el Cementerio Central de Puerto Príncipe, lo que ayer era una marea de gente hoy fue una discreta llegada de visitantes al camposanto.
Allí, el lugar más concurrido era el entorno de la gran cruz negra que marca el primer enterramiento del cementerio, principal punto de culto en esta fiesta vudú.
Con el avance de la mañana se fue intensificando la actividad, los rituales, las ofrendas, los rezos, los bailes y el derroche de ron, rociado sobre tumbas, símbolos y restos óseos o generosamente ingerido por los creyentes.
Los vestidos blancos de la mujeres, frotándose el sexo con licor macerado en picante, los rostros blanqueados con talco y el color morado, que significa renacimiento, volvieron a vestir el cementerio, pero sin la exuberancia de la víspera.
Por otro lado, los haitianos siguen a la búsqueda de combustible tras semanas de escasez, causada por los bloqueos impuestos por las bandas armadas.
Este martes fue el tercer día consecutivo de aglomeraciones en las gasolineras a las que por fin llegó combustible después de que se reanudara el suministro del producto.
La escasez de combustible no impidió a los fieles asistir al cementerio el lunes, aunque hoy las aglomeraciones en las gasolineras superaban a la asistencia de fieles a los camposantos.