Un día después del tiroteo en Bramble Park, Madisonville, que dejó cinco heridos, los organizadores del evento y líderes comunitarios se reunieron para buscar soluciones. El tiroteo ocurrió durante el evento inaugural del Día de Madisonville, destinado a transmitir un mensaje positivo a los jóvenes de la comunidad. “Aquí todavía hay esperanza, no sólo están sucediendo cosas malas”, expresó Donté Swain, uno de los organizadores.
El evento, que contaba con actividades como brincolines y un DJ, se vio interrumpido por una pelea y disparos, según testigos que escucharon entre 20 y 30 disparos. El Departamento de Policía de Cincinnati (CPD) informó que cinco personas resultaron heridas, incluyendo dos de 30 y 39 años, y una persona permanece en estado crítico. Los organizadores describieron la situación como desgarradora, con niños aterrorizados en el suelo. “Frustración, tristeza, ver a los niños llorando realmente te rompe el corazón”, dijo el organizador principal Damir Gooch.
La jefa de policía de Cincinnati, Teresa Theetge, enfatizó la necesidad de soluciones comunitarias y colaboración con la policía para abordar la violencia armada. “No es una solución de libro de texto. Cualquiera que tenga una idea debe hablar con nosotros”, declaró Theetge, subrayando que la solución no depende solo de la policía. Los organizadores del evento reafirmaron su compromiso con la comunidad y aseguraron medidas de seguridad para futuros eventos. La comunidad de Madisonville planea regresar a Bramble Park el martes para su evento semanal de verano, manteniendo la esperanza y la unidad frente a la adversidad.