Aunque las últimas dos semanas han sido complicadas para los Bengals, lo importante ha sido cómo lograron las victorias. Tras derrotar a los Giants 17-7, Cincinnati venció a los Browns 21-14, rompiendo una racha de seis derrotas consecutivas en Cleveland. Fue la primera victoria en esa ciudad tanto para el mariscal de campo Joe Burrow como para el entrenador en jefe Zac Taylor, un avance crucial para el equipo en su lucha por la postemporada.
Las victorias recientes llegan después de una seguidilla de tres juegos en los que los Bengals anotaron más de 33 puntos, aunque solo lograron un triunfo. En la primera mitad del duelo ante Cleveland, la ofensiva mostró dificultades con apenas 86 yardas, pero el regreso de 100 yardas para touchdown de Charlie Jones y las patadas estratégicas del pateador Ryan Rehkow fueron clave. La defensa, además, forzó a los Browns a comenzar varias series dentro de su yarda 20, dificultando su avance ofensivo.
"Esta fue una victoria importante para el equipo y especialmente para nuestra defensa", comentó Taylor. “El inicio de la segunda mitad marcó el tono perfecto". Sam Hubbard, quien logró su primera intercepción en el tercer cuarto, destacó el valor del triunfo: "Ganar aquí, donde históricamente no lo habíamos hecho, es fundamental para nuestro futuro". Con marca de 3-4, los Bengals demuestran que, más allá de los altibajos, están listos para pelear por un lugar en la postemporada.