Sofía, 12 ene (EFE).- La intervención de la Policía de Bulgaria ha evitado que decenas de manifestantes entraran a la fuerza en el Parlamento del país balcánico para protestar contra los certificados covid, necesarios para acceder a bares y otros lugares de ocio.
Miles de manifestantes, alrededor de unos 5.000 según los medios búlgaros, se concentraron este mediodía ante el Parlamento para protestar contra las restricciones impuestas por el Gobierno para frenar la expansión de la covid.
Un amplio grupo de los reunidos trató de irrumpir a la fuerza en la Cámara, cruzando el cordón de seguridad y golpeando las puertas del edificio, lo que ocasionó la intervención de los agentes, que consiguieron hacer retroceder a los manifestantes a empujones.
Cuatro de los agentes resultaron heridos en los altercados y tuvieron que ser trasladados a centros médicos.
Las fuerzas de seguridad han reforzado el perímetro de la Cámara con vallas metálicas y efectivos adicionales, y han desplazado al lugar un cañón de agua.
La protesta está organizado por el partido ultranacionalista Vazrazhdane, que entró por primera vez en el Parlamento en los comicios del 14 de noviembre y cuenta con 12 escaños.
Según esta formación el certificado covid como requisito para entrar en los locales de ocio es "discriminatorio" y atenta contra los derechos constitucionales.
El líder de Vazrazdane, Kostadin Kostadinov, está en cuarentena, al igual que el presidente del país, Rumen Radev, y la cúpula del Gobierno, ya que mantuvieron contacto con el presidente del Parlamento, Nikola Minchev, que dio ayer positivo.
Bulgaria es el país de la Unión Europea con menor tasa de vacunación, sólo un 28 % de sus 6,5 millones de habitantes tienen la pauta completa, y con mayor mortalidad por covid en relación a la población, con unos 4.600 fallecidos hasta ahora por millón de habitantes.