Moscú, 22 oct (EFE).- El canciller de Bolivia, Rogelio Mayta, aseguró hoy que el comportamiento de la Organización de Estados Americanos (OEA) respecto a las elecciones presidenciales del país andino en 2019 ha sido "absolutamente cuestionable".
"Su comportamiento ha sido absolutamente cuestionable. Lo muestra la investigación de la Justicia boliviana y estas otras investigaciones independientes que se están presentando hoy" en Washington, dijo Mayta en rueda de prensa conjunta con su colega ruso, Serguéi Lavrov.
Por ello, consideró que "la propia OEA debe plantearse la necesidad de evaluar su misión electoral en Bolivia de 2019 y la auditoría que se realizó entonces".
"Debo resaltar que en función del informe de la OEA que decía que hubo fraude en Bolivia se inició un proceso judicial cuando estaba en funciones el Gobierno golpista. Esa investigación está en su fase final y ha evidenciado que no existió fraude en los términos que expresaban los informes de la misión electoral de la OEA y de la misión de auditoría que enviaron", subrayó.
A su vez, recordó que, aunque "lo que prima fundamentalmente es la decisión de las autoridades y de la justicia boliviana", hoy en Washington tiene lugar una reunión que demuestra que "no sólo la Justicia boliviana llegó a esa conclusión".
"Efectivamente el día de hoy en Washington está teniendo lugar un encuentro de diferentes expertos independientes, muchos de ellos estadounidenses, que han llegado precisamente a la misma conclusión de que en el proceso electoral de 2019 en Bolivia no existió ningún tipo de fraude que haya alterado la decisión del pueblo boliviano", resaltó.
Mayta destacó que a dicho evento se invitó a los expertos de la OEA "que realizaron esas acusaciones de fraude para que puedan defender su posición".
"Quedará en ellos si participan o no", dijo.
Recientemente, la OEA declinó participar en un evento organizado por el Gobierno de Luis Arce sobre las elecciones generales de 2019 en Bolivia y ratificó que se trata de un "tema cerrado" por las "irregularidades" en un proceso "que perdió toda integridad".
Bolivia estuvo sumida en una crisis social y política tras los comicios del 20 de octubre de 2019, que fueron anulados por las denuncias de que hubo un presunto fraude electoral a favor del entonces presidente, Evo Morales.
Tras el informe de la OEA, que se conoció la madrugada del 10 de noviembre de 2019, Morales primero anunció nuevas elecciones y horas después dimitió, alegando ser víctima de un supuesto "golpe de Estado".