Lima, 18 oct (EFE).- Cientos de mujeres de pueblos originarios de América Latina aprobaron este lunes una declaración conjunta que exhorta a los gobiernos regionales a impulsar políticas públicas que garanticen su derecho a decidir sobre su cuerpo y luchen para erradicar el patriarcado y cualquier tipo de violencia contra ellas.
"No somos comprendidas como seres humanos, nos consideran como un objeto sexual. Ni el Gobierno, ni la Iglesia, ni la sociedad civil tienen derecho a decidir por nosotras sobre nuestros cuerpos", declaró a Efe Lourdes Huanca, presidenta de la Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas y Asalariadas del Perú (Fenmucarinap).
Esta es una de las súplicas más "fuertes y contundentes" que integran la declaración que se presentará ante el Foro Permanente de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y que recoge las conclusiones de la Segunda Cumbre de Mujeres Indígenas de Abya Yala, que reunió durante cinco días en Lima a alrededor de 650 mujeres de pueblos originarios de más de diez países de la región.
El encuentro vino impulsado por su afán de trazar alianzas regionales y definir una agenda conjunta que saque a la luz las problemáticas que enfrentan e impulse reformas a favor de sus derechos.
RECLAMOS URGENTES
En la declaración, a la que tuvo acceso Efe, se exhorta a las autoridades regionales a priorizar el combate contra la violencia sexual, física y psicológica que sufren las mujeres indígenas y contra el patriarcado, que las "mata y viola".
"Muchas veces se dice que es costumbre, entre comillas, dentro de los pueblos indígenas que el padre, el tío, el hermano o el sobrino violen a las niñas, pero esto no es cultura, esto es violación de derechos", espetó a Efe Huanca, quien precisó que las participantes de la cumbre se comprometieron a exigir a sus respectivos Estados el cumplimiento del aborto terapéutico.
Pidieron, además, que se garantice la soberanía alimentaria "permanente y constante para todos los pueblos indígenas" y que se "respeten y valoricen" sus medicinas ancestrales.
REFORMA AGRARIA Y CONSTITUCIÓN
A las demandas regionales se sumaron también reclamos a nivel nacional y, en este sentido, instaron al Gobierno peruano a considerar a las mujeres indígenas y rurales en la segunda reforma agraria que el presidente Pedro Castillo lanzó el pasado 3 de octubre.
"Debe ser una reforma que apueste por la despatriarcalización. La reforma sin mujeres no es reforma agraria", se lee en el documento.
Asimismo, demandaron una nueva Constitución en el Perú, que reconozca su "identidad, sabiduría ancestral, culturas y derechos, en especial de las mujeres y jóvenes".
"Hemos aprendido y nos inspiran los procesos constituyentes en Chile y Bolivia. La constitución debe ser el primer paso para que el Perú venza por fin la deuda histórica con los pueblos indígenas", manifestaron.
MARCHAS Y DEBATES
La Segunda Cumbre de Mujeres Indígenas Abya Yala arrancó el pasado 14 de octubre en Lima, hasta donde se desplazaron alrededor de 500 mujeres indígenas de todo el Perú y otras 145 delegadas provenientes de más de diez países de América Latina.
El primer acto público de la cumbre se celebró el viernes pasado, cuando cientos de ellas marcharon por las principales avenidas de la capital peruana para visibilizar su aporte económico, social y ambiental en la región.
Durante el fin de semana, se desarrollaron foros para discutir los desafíos que enfrenta América Latina en la igualdad de derechos y oportunidades para las mujeres indígenas, la defensa del territorio y el medioambiente.
En concreto, el sábado se realizaron dos mesas de trabajo que trataron asuntos como la igualdad de género y la defensa de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres de los pueblos originarios.
El domingo se abordaron en otros dos espacios de debate los retos del modelo económico y del cambio climático en la lucha de las mujeres por la soberanía alimentaria con trabajo digno.
Finalmente, la cumbre culminó este lunes con el primer encuentro de las jóvenes del Abya Yala y la aprobación de la declaración conjunta.
Este fue el segundo encuentro de mujeres indígenas Abya Yala, luego de la primera cumbre celebrada en mayo pasado en Bolivia, donde se conformó un comité de defensa para prevenir los índices de violencia y feminicidios contra las mujeres.
Según informaron a Efe las asociaciones organizadoras, la idea es instaurar dos citas anuales y, para 2022, se prevé que Guatemala y México sean las sedes de las cumbres que se celebrarán en marzo y octubre próximo, respectivamente.