Tres individuos que fallecieron en sus casas, en el condado de Santa Clara, en California, en el mes de febrero –mucho antes del primer registro de defunción asociado al brote– resultaron positivos del virus causante del COVID-19, después de que los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) analizaran rigurosamente las muestras de tejidos.
El equipo forense de los CDC realizó las autopsias a estas personas que murieron en sus residencias el 6 y 17 de febrero de 2020.
De acuerdo a un comunicado de prensa del Centro de Operaciones de Emergencias del Departamento de Salud del Condado de Santa Clara, el 21 de abril de 2020, la oficina forense recibió confirmación de que –en ambos casos– las muestras de tejidos resultaron positivas de SARS-CoV-2, el virus causante del COVID-19.
También se confirmó que otro individuo murió por COVID-19 en este condado, el 6 de marzo de 2020.
El análisis forense demuestra que las tres personas fallecieron en sus residencias durante un período en que las pruebas para COVID-19 estaban restringidas, limitando su disponibilidad a través de los CDC.
“Los criterios de prueba establecidos por los CDC en ese momento restringían las pruebas solo a personas con antecedentes de viaje conocidos y que buscaban atención médica para síntomas específicos”, destaca el comunicado.
Tras el reporte, los expertos en medicina forense continuarán las investigaciones de casos similares mientras las autoridades de salud del condado anticipan que –ante las circunstancias– estarían revelando más muertes, en la medida que se analicen nuevas muestras.