Barcelona, 11 feb (EFE).- El central internacional y capitán del Barça y de la selección española, Raúl Entrerríos cumplirá mañana 40 años; un cumpleaños muy especial porque, ahora definitivamente, será el último como jugador en activo y no oculta que después de 20 temporadas "cuando llegue ese momento será duro, como cualquier etapa que cierras, y será una pena, pero es ley de vida y hay que aceptarlo así".
En declaraciones a EFE, Enterríos admite que es "interesante saber cuando te sientes bien", en su caso "competitivo" y dar un paso atrás cuando "crees que es el momento".
"Creo que acabar mi carrera con cuarenta años es ya algo muy importante y se me abre la oportunidad de tener continuidad en el club y trabajando en lo que más me gusta: el balonmano", recordó.
Su decisión de jugar una temporada más le ha dado la posibilidad de estar en una final de la Champions más, el pasado mes de diciembre y que el Barça perdió. Ahora va camino de poder disputar otra, así como de retirarse el próximo verano con otra medalla en unos Juegos Olímpicos.
"Creo que todos hubiésemos deseado que esto de la pandemia no hubiese ocurrido, porque eso lo hubiese cambiado todo. Es cierto que el hecho de acabar la pasada temporada de forma tan abrupta como lo hicimos y sin completar las competiciones, no era el final que yo deseaba para una carrera larga como la mía", explicó.
Entrerríos recuerda que su idea era retirarse compitiendo, en la pista y luchando por todos los títulos posibles. "Y eso es lo que tenemos esta temporada, que está siendo increíble en este aspecto. Hemos tenido la oportunidad de luchar por una Final Four y ahora estamos en un buen camino para estar en otra", indicó.
"Además, también a nivel de Selección he tenido la posibilidad de jugar un Mundial más y espero que también los Juegos Olímpicos. Todo eso son cosas que tengo que aprovechar y disfrutar porque en un temporada de despedida lo que quieres, sobre todo, es disfrutar cada instante, cada entrenamiento y cada partido; sin duda en esta temporada tengo, y voy a tener, muchos momentos de estos", concretó.
Si el Barça gana la Liga Asobal esta temporada, Raúl Entrerríos las habrá ganado todas desde que llegó, siempre a las órdenes de Xavi Pascual, un hecho que le parece "extraordinario e increíble".
"Cuando llegué a este club no imaginé que esto pudiese ser posible, porque era un momento en que el Ciudad Real había ganado las cuatro ligas anteriores", comentó.
Este año se cumplirán 18 de su llegada a la Selección Española y ocho de ser el capitán. Ir a sus terceros Juegos Olímpicos y poder luchar por una medalla como líder del equipo puede ser un sueño.
"Primero vamos a esperar a que lleguen los Juegos, que deseo que se celebren, pero todos debemos ser muy cautos para ver que catorce jugadores van a estar en la lista", dijo.
Campeones de Europa en 2018 y 2020 y bronce en el Mundial de este año, el asturiano considera que para cualquier jugador estar en la Selección es "lo máximo" y en su caso ser el capitán del equipo "un gran privilegio".
"Intento llevarlo con la máxima humildad y el máximo respeto a lo que representa", afirmó Entrerríos, que tras el Mundial de Egipto está a un solo encuentro de igualar las 280 internacionalidades de David Barrufet y convertirse en el jugador español con más partidos jugados.
"La verdad es que cuando empiezas a jugar a este deporte como profesional o entras en la Selección siempre intentas tener continuidad y competir con la misma ilusión que el primer día. Lo demás, quizás son cifras muy importantes para un jugador y que no tienes tanto en cuenta hasta que te retiras echando la vista atrás y ver lo que has conseguido. Esto era difícil de imaginar cuando empecé", afirmó.
Después del bronce en Pekín 2008 y del sexto puesto de Londres 2012, la posibilidad de mejorar ese bronce es un objetivo. "Personalmente tener una medalla olímpica es lo máximo porque los Juegos son el mayor evento al que un deportista puede aspirar. La que logré en Pekín en mis primeros Juegos ha sido la más especial y ahora se me abre otra oportunidad y lucharé por ella", insistió.
Cuando se le pregunta sobre la posibilidad de que su camiseta con el '9' podría ser la séptima del equipo de balonmano y la segunda de un jugador no catalán que estuviese retirada y colgada en lo más alto del Palau Blaugrana, Entrerríos responde que no piensa en ello.
"Yo ya me siento orgulloso simplemente por haber estado tantos años aquí, algo que no es sencillo para un jugador de fuera. Llegué con 29 años y he tenido capacidad para adaptarme y ser competitivo en todo momento", insiste.
A partir de la próxima temporada se encuadrará en el 'staff' técnico de la sección de balonmano, "un cambio significativo" después de veinte años.
"Lo llevo pensando desde hace ya varios años, entendiendo que este momento me iba a llegar. Entonces ya se verá donde estaré y voy a intentar ayudar y seguir aprendiendo", concluyó el gran capitán azulgrana.