Palma, 5 nov (EFE).- El aeropuerto de Palma ha vuelto a permitir los aterrizajes y despegues tras suspender las operaciones durante casi tres horas y media después de que se dieran a la fuga a través de las pistas una veintena de viajeros de un vuelo aterrizado de urgencia por una supuesta emergencia médica.
Según ha informado Aena, el bloqueo ha ocasionado el desvío de 13 vuelos que debían llegar a la capital balear a Barcelona (5), Ibiza (4), Menorca (2), Madrid (1) y Valencia (1).
Además, ha sufrido retrasos otra cuarentena de vuelos nacionales e internacionales tanto de llegada como de salida, ha indicado la empresa pública gestora de los aeropuertos españoles.
Un vuelo procedente de Marruecos con destino a Turquía ha realizado una escala imprevista en las pistas del aeropuerto de Son Sant Joan a las 20.30 horas tras avisar de que un pasajero diabético se encontraba indispuesto y necesitaba atención médica urgente.
En esa escala, entre 15 y 20 pasajeros del avión han abandonado el aparato cuando la ambulancia procedía a evacuar al presunto enfermo y han emprendido la huida por las pistas del aeropuerto, lo que ha obligado a sus responsables a detener todas las operaciones en cumplimiento de los protocolos de seguridad.
El hombre que supuestamente estaba enfermo ha sido trasladado en ambulancia hasta el hospital de Son Llàtzer de Palma junto con una persona que le acompañaba en el avión. Este acompañante se ha dado a la fuga y el causante del aterrizaje de emergencia ha sido dado de alta de inmediato y se encuentra bajo custodia policial.
Agentes de la Guardia Civil y de seguridad privada en una veintena de vehículos han recorrido las pistas de Son Sant Joan para tratar de localizar a los viajeros fugados, que, según la hipótesis que manejan los investigadores, han abandonado el avión con la intención de ingresar de forma irregular en España.
La Policía Nacional también ha movilizado numerosos efectivos para buscar a los pasajeros en las zonas exteriores a las vallas que cierran el aeropuerto porque sospechan que podrían haber abandonado el recinto.
Asimismo, los responsables de seguridad han comprobado la lista de pasajeros para tratar de determinar cuántos son los fugados y descartar su presencia en las pistas para poder autorizar de nuevo el movimiento de aeronaves.