Estambul, 29 jun (EFE).- Cientos de periodistas han protestado este martes en Ankara, Estambul y Esmirna contra la agresión de la policía al fotorreportero Bülent Kiliç, que fue reducido mientras cubría la marcha del Orgullo Gay en Estambul, el sábado pasado, con una violencia que recuerda el caso de George Floyd.
Los agentes antidisturbios dispersaron el tradicional desfile, prohibido desde 2014 pese a que la homosexualidad es legal en Turquía, practicando numerosas detenciones e inmovilizando en el suelo a Kiliç, que cubría la marcha para la Agence France Press (AFP).
El vídeo de la detención, con un policía arrodillado sobre el cuello del fotoperiodista, se hizo viral bajo el lema "No podemos respirar", recordando la muerte de George Floyd en Estados Unidos por una agresión policial similar el año pasado.
El fotógrafo fue puesto en libertad al poco rato de ser detenido, pero ha interpuesto denuncia contra la policía por agresión y daños a su equipo fotográfico.
"Esto puede volver a ocurrir. Para que no suceda hay que poner fin a la impunidad", advirtió Kiliç al intervenir durante el acto.
"La violencia política contra los periodistas que cubren protestas en la calle se ha convertido en una rutina", dijo a Efe en Ankara Can Güleryüzlü, presidente de la Asociación Progresista de Periodistas, una de las entidades profesionales que habían convocado la protesta de hoy.
"Este último caso contra nuestro colega de AFP podría haberle causado la muerte, al igual que pasó con Floyd. Por eso, 15 asociaciones profesionales se han unido en la protesta", agregó Güleryüzlü.
En Estambul, alrededor de 150 reporteros y corresponsales se congregaron ante el edificio de la delegación del Ministerio del Interior, gritando consignas como "No podemos respirar", "La prensa libre no callará" y "Stop violencia".
Los fotoperiodistas presentes colgaron sus cámaras de las rejas del recinto en un acto de protesta.
También la sección turca de la organización internacional Reporteros sin Fronteras (RsF) ha condenado la agresión policial.