Brasilia, 1 ene (EFE).- El rey de España, Felipe VI, que encabeza la delegación española en la investidura del presidente electo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que se celebra este domingo, espera que Brasil tenga un papel internacional "muy activo".
"Esperamos que Brasil tenga un papel internacional muy activo", dijo el jefe de Estado español, en un encuentro con una representación de la colectividad española en la embajada en Brasilia.
Felipe VI llegó a la capital brasileña junto con el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, para presenciar la toma de posesión del dirigente progresista, que asumirá su tercer mandato, tras haber gobernado por dos periodos consecutivos entre 2003 y 2010.
Ambos fueron recibidos en el aeropuerto por personal de la cancillería brasileña y por la vicepresidenta y ministra de Trabajo de España, Yolanda Díaz, quien había llegado la noche del viernes.
El rey valoró la relación entre Brasil y España tanto por "la trayectoria histórica", como por los "intereses comunes" y "compartidos" de ambas naciones, y afirmó que el país suramericano vive un "momento de cambio".
"Y por supuesto darle todo el énfasis a todos los temas conjuntos" en los que ambos países tienen "interés mutuo, tanto en este lado del Atlántico, como en Europa y en otras partes del mundo", expresó.
A la toma de posesión de Lula asistirá una veintena de jefes de Estado y de Gobierno, entre los que figuran los líderes de Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Paraguay, Uruguay, Alemania y Portugal.
Esta visita es la primera de Felipe VI a Brasil desde que relevó en el trono a Juan Carlos I en junio de 2014.
La anterior había sido en 2011, cuando asistió como príncipe de Asturias a la investidura de Dilma Rousseff, quien sucedió a Lula tras ser presidente entre 2003 y 2010.
Hace hoy veinte años, también había estado en Brasilia el 1 de enero de 2003, cuando Lula asumió el poder en su primer mandato.