Londres, 14 mar (EFE).- La policía antidisturbios ha entrado hoy en una mansión del centro de Londres perteneciente a uno de los oligarcas rusos sancionados por el Gobierno británico después de que ésta fuera tomada por un grupo de okupas en protesta por la invasión rusa de Ucrania.
La Policía Metropolitana de Londres (Met) emitió un comunicado en el que informó de que los agentes mantienen contacto con cuatro okupas "que están sentados en el balcón (de la propiedad), al tener en cuenta tanto la necesidad de imponer la ley como la de velar por la seguridad de todos los implicados" en el incidente.
Los ocupantes de la lujosa propiedad colgaron banderas ucranianas y carteles con mensajes como "Esta propiedad ha sido liberada", por el exterior del edificio, situado en la exclusiva plaza de Belgravia, cercana a varias embajadas extranjeras, al tiempo que animan a los ciudadanos a unirse a su protesta.
Según señalan los medios locales, se cree que la vivienda de siete dormitorios, ubicada en uno de los barrios más caros de la capital británica, pertenece al magnate Oleg Deripaska, estrecho aliado del presidente ruso, Vladímir Putin.
Al parecer, los okupas no tienen intención de instalarse de forma indefinida ni de dormir en la propiedad y la ocupación pretende servir de acto de rechazo contra la invasión de las tropas rusas a Ucrania.
"Con la ocupación de esta mansión, queremos mostrar solidaridad con los ucranianos, pero también con los rusos que nunca han estado de acuerdo con esta locura", afirman los okupas, que se definen como anarquistas, en un comunicado.
Según informó la cadena Sky News, dos de los ocupas trataron de montar una barricada para bloquear la entrada de dos agentes que accedieron al balcón a través de un edificio aledaño.
Los ocupas, según los medios, compartieron una bebida de un mismo vaso mientras uno cantaba una canción de la banda sonora de la película "Dirty Dancing", "I´ve had the time of my life".
Deripaska, fundador de la compañía de metales e hidroenergía EN+, ha sido objeto de sanciones por parte de Estados Unidos desde 2018 como resultado de su estrecha relación con Putin.
La vivienda ocupada, que cuenta con una sala de cine, un gimnasio y una sauna turca, fue comprada mediante Ravello Limited, una compañía "offshore" de las Islas Vírgenes, señalan los medios.
La Agencia del Crimen Nacional (NCA) solicitó la congelación de los activos de cinco cuentas bancarias a nombre del oligarca a raíz de la invasión de Ucrania por las tropas rusas.